Mi reto de lectura va viento en popa. He leído 7 de los libros que me propuse y el octavo marcha a buen ritmo. He empezado alguno más, pero no me ha enganchado, así que me tocará buscarles un sustituto para intentar cumplir el reto total de 22 lecturas en el año.
Es cierto que algunos de los libros escogidos no son excesivamente largos, pero me parecía imposible cumplir el reto con novelas de 800 páginas.
Éstas han sido mis primeras lecturas del año:
- El regalo, de Eloy Moreno. Este ha sido el libro de un autor contemporáneo de mi país. Eran muchos los candidatos a esta categoría, pero me compré esta novela cuando se publicó y tenía mucha curiosidad por leerla después de haber disfrutado tanto con los dos primeros libros de este autor, El bolígrafo de gel verde y Lo que encontré bajo el sofá. Reconozco que me ha gustado algo menos que las anteriores, pero es una lectura amena y una historia original con un importante mensaje final.
- Un grito de amor desde el centro del mundo, de Kyoichi Katayama. Necesitaba el libro favorito de uno de mis escritores favoritos y enseguida encontré en la web oficial de Andrés Pascual varias referencias a sus obras más queridas. Es una novela corta sobre el primer amor, la adolescencia, la enfermedad y la pérdida.
- Una extraña en la playa, de Marie Hermanson. Una madre viaja con sus hijos al lugar de veraneo de su infancia y allí descubrirán un misterio que se gestó muchos años atrás. No está mal, pero se me hizo un poco pesada la parte central de la historia.
- Un monstruo viene a verme, de Patrick Ness. Elegí este libro entre las adaptaciones cinematográficas del año. Tiene un punto infantil, aunque también es un libro cargado de drama y sentimientos en el que un niño se enfrenta a la grave enfermedad de su madre. Después de haberlo leído, tengo curiosidad por ver su adaptación al cine.
- El último pasajero, de Manel Loureiro. En esta categoría, la de best-sellers, también tenía muchos candidatos. Pero el argumento de este libro, me picó la curiosidad: unos marineros se encuentran un misterioso buque abandonado en medio del océano con un único y peculiar pasajero.
- El peregrino, la muerte y el diablo, de Rosa Villada. Ya había leído alguna otra novela de esta autora albaceteña. En este caso, la historia transcurre en pleno camino de Santiago. Para los amantes de esta ruta, me parece un libro interesante porque recorre muchos de sus lugares emblemáticos. Una chica a la que la vida se la ha vuelto del revés decide irse a hacer el camino y allí se encontrará de frente con la amistad, el dolor y el amor.
- Novela de ajedrez, de Stefan Zweig. Me costó encontrar un título para la categoría de libros publicados de manera póstuma y elegí éste porque era muy cortito. No me ha gustado mucho, lo reconozco, pero puede ser una buena lectura para los forofos del ajedrez.